Tras la detonación que afectó el peaje Palocabildo, autoridades iniciaron una ofensiva para ubicar a los responsables y reforzar la seguridad en el Valle de Aburrá.
Autoridades avanzan en la investigación para capturar a los implicados
Las autoridades del Valle de Aburrá mantienen activa una operación especial luego de la detonación de un artefacto explosivo en el peaje Palocabildo de Girardota, hecho atribuido de manera preliminar al ELN. De acuerdo con la información recopilada, dos hombres en moto habrían instalado el explosivo que destruyó dos casetas antes de huir del lugar.
El general William Castaño, comandante de la Policía Metropolitana, señaló que desde el primer momento se puso en marcha una cápsula antiterrorismo. Con el apoyo del Ejército, los equipos de investigación criminal, inteligencia y GAULA avanzan en la identificación, judicialización y captura de los responsables. El objetivo es esclarecer lo ocurrido y evitar que este tipo de acciones se repitan en la subregión.
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El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, pidió fortalecer las labores de inteligencia para prevenir nuevos ataques que puedan afectar tanto a la ciudad como a los municipios del área metropolitana. Aseguró que militares, policías y la Fiscalía deben ejecutar allanamientos y operativos que permitan anticiparse a posibles acciones criminales.
El gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, hizo un llamado a la Fiscalía para agilizar las decisiones judiciales necesarias, especialmente las relacionadas con allanamientos. Indicó que estos procedimientos son esenciales para enfrentar la amenaza y permitir que la Fuerza Pública incremente la capacidad de disuasión en el territorio.
Las autoridades confirmaron que continúan tras la pista de los responsables y mantienen activos los controles de seguridad en la zona mientras avanzan las investigaciones.
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